Mi cuerpo se ha convertido en una jaula para mi alma que figura ser ave cuando sueña, pero que no puede volar con manos, mas que con las cosas que crean ellas; cuerpo que me limita en la distancia, que encarcela mis deseos de tocarte, de besarte pero no me impide amar tu cuerpo desde lejos.
Asi he de vivir mi condena, transmitir mi voz y endulzar de melosos cantos tu oido, pero no poder escuchar mi vibrato hacer eco en la cueva de tus sentidos, y que sentido reciproco tiene eso.
Asi sera mi alma presa del cuerpo que le ayuda a explorar al mundo, el cuerpo se hizo para que el alma fuera visible ante el mundo, pero que mas visibles que mis dudas sobre ti y por consecuencia de todo.
Esta carcel no me da la oportunidad de sentir sus brazos pero si imaginarme la textura de su piel, tela perfumada de besos, de exquisitas pasiones bañadas en huellas ajenas. El cuerpo te limita mientras la imaginacion y la palabra te deja pasear y llegar donde la presencia impide existir, donde no puedes aparecer por medio de un vuelo o por magia en el instante que conteste esa persona amada tu llamada.
No se puede ser del todo libre, si cargas en tu conciencia el peso de ser un hombre, un ser tàngible con sueños invisibles.
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