Debajo de los astros verdes
vi suspenderte en serenidad,
la noche dormia en la copa de un árbol
y nosotras debajo escuchando la vida caer
en fragmentos de noche.
Mis palabras parecen desesperadas
cuando hablo de ti,
pero antes solian bailar en las hojas
haciendo vibrar el suelo con su intensidad de gozo,
ahora simulan un canto que se confunden
con el cansancio que resta del cuerpo,
aquel que anduvo de viaje por la ciudad
para adaptar sus pasos a tu andar.
Una de estas noches en ese gran árbol,
cerraras los ojos junto al sol,
veras brotar su corazón de la corteza
darte un beso en la tierra
y llevarte a donde nos dijieron
que el tiempo no tendria limites
y que el amor se bebiera en fuentes constantes
de magia y casualidad,
donde estuviera esa persona
abrigando tus sueños en su alma,
para cuando te cegaras y perdieras la esperanza,
cuando el instante te llevara al olvido de toda tu historia
supieras como regresarla al camino
donde siempre fuiste amada.
vi suspenderte en serenidad,
la noche dormia en la copa de un árbol
y nosotras debajo escuchando la vida caer
en fragmentos de noche.
Mis palabras parecen desesperadas
cuando hablo de ti,
pero antes solian bailar en las hojas
haciendo vibrar el suelo con su intensidad de gozo,
ahora simulan un canto que se confunden
con el cansancio que resta del cuerpo,
aquel que anduvo de viaje por la ciudad
para adaptar sus pasos a tu andar.
Una de estas noches en ese gran árbol,
cerraras los ojos junto al sol,
veras brotar su corazón de la corteza
darte un beso en la tierra
y llevarte a donde nos dijieron
que el tiempo no tendria limites
y que el amor se bebiera en fuentes constantes
de magia y casualidad,
donde estuviera esa persona
abrigando tus sueños en su alma,
para cuando te cegaras y perdieras la esperanza,
cuando el instante te llevara al olvido de toda tu historia
supieras como regresarla al camino
donde siempre fuiste amada.
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